1.  ‑El sistema interviene enteramente sobre las potencialidades de enfoque. Los ejercicios tienen la plena potencialidad de conferir a los ojos una elevadísima capacidad coordinativa y un progresivo restablecimiento del sistema de enfoque.

El sistema lo he puesto a prueba personalmente con éxito sobre el defecto funcional visual de la “miopía” y es válido de manera SEGURA y CIERTA también para la hipermetropía, considerando que los instrumentos de intervención son los mismos: aumento de la capacidad de los ojos de desplazar la imagen fijada sobre la porción retiniana más sensible, que es la fóvea central, mediante la DEBIDA utilización de lentes de entrenamiento.

Respecto al problema del astigmatismo, no me atrevo a garantizar una eventual regresión, ya que no poseo pruebas ciertas e irrefutables (como poseo para la miopía). Esto NO significa que no funcione para una regresión progresiva del defecto del astigmatismo: el mejoramiento en la funcionalidad de los músculos oculomotores (extrínsecos del ojo), unido a la potenciación del sistema de enfoque, es verosímil (cuando menos) que intervenga de manera indirecta también sobre el astigmatismo. En honor a la verdad, no lo puedo asegurar. Tenéis que ser vosotros, lectores, quienes confirméis una hipótesis como ésa: mediante la práctica confiada del método.

2.  ‑En el estiramiento de los ojos, en las diversas secuencias prescritas por el método Power Vision System, la velocidad debe ser lenta y controlada. Este tipo de técnica muscular se denomina, en la ciencia del stretching, “estiramiento estático activo”. Imprescindiblemente, tengo que explicarte algunos conceptos de entrenamiento muscular, ya que de puro entrenamiento muscular se trata. El estiramiento y el alargamiento de los músculos oculares ocurre, en una porción dada del rango visual, mediante un músculo AGONISTA que se contrae y su ANTAGONISTA que se alarga. Todo músculo es agonista o antagonista, dependiendo del movimiento que en un momento dado está desarrollando. Para que lo entiendas mejor: cuando miras hacia abajo, algunos músculos son agonistas y otros, situados en la sección opuesta de los ojos, son antagonistas. Cuando, en cambio, miras hacia arriba, vale exactamente lo contrario. Esto, en relación con tu pregunta sobre la rapidez de los movimientos de estiramiento ocular, para que comprendas que el estiramiento está provocado por un acortamiento y contracción (por tanto, una POTENCIACIÓN) del músculo opuesto. Los músculos, pues, se han de contraer con una cierta INTENSIDAD, precisamente para intervenir de manera eficaz sobre la entidad del estiramiento.

EN LA PRÁCTICA: rotaciones y “apuntamientos” lentos y controlados, INSISTIENDO precisamente en aquellas secciones del campo visual que resultan más difíciles y donde percibimos un “bloqueo” o una desviación en el movimiento (estos fenómenos testimonian la necesidad de restablecer la simetría muscular local exacta y, por tanto, de aumentar la precisión de la capacidad de fijación y apuntamiento).

3.  ‑En el punto 1 deben entenderse rotaciones completas de un giro completo cada uno: dos con los ojos abiertos y dos con ellos cerrados. La finalidad es la de una especie de “calentamiento” de los músculos oculares, con objeto de prepararlos para los posteriores ejercicios incluidos en los puntos 2 y 3. Los protocolos de trabajo reflejan una modalidad de trabajo “estándar”. Nada impide adaptarlos a las propias exigencias personales. Si, por ejemplo, como sucede a menudo, en una porción del rango de tus ojos (mirando fijo abajo a la izquierda), notas un desdoblamiento de la visión que revela una asimetría muscular, debes insistir precisamente en esa porción del rango visual. Las rutinas presentadas en Cómo me curé la miopía tienen el objetivo de crear modalidades de trabajo de intensidad creciente. También en el “nivel avanzado”, el tiempo requerido es razonable y cualquier persona, haga el trabajo que haga, puede desarrollarlas de manera bastante fácil y cómoda.

4.  ‑Tus miedos son fundados. La diferencia en la capacidad de enfoque de tus ojos tiende a hacer que prevalezca la visión del ojo que ve mejor. El resultado es que el cerebro tiende a utilizar más la percepción visual del ojo más sano, haciendo vago y empeorando progresivamente el ojo funcionalmente menos capaz. Hay solución, y es entrenar en la focalización (como se prescribe en mi libro) PRIMERO el ojo con defecto visual de grado más elevado, procediendo a cubrir con una venda el ojo “mejor”. Este procedimiento mejorará progresivamente su capacidad de enfoque, hasta IGUALAR la del otro ojo. ÚNICA y EXCLUSIVAMENTE en ese punto, podrás entrenar a la vez ambos ojos (y para ti será una liberación). Este procedimiento con la venda tiene el objetivo de evitar el fenómeno de la supresión del ojo, por así decirlo, “menos bueno” y, por tanto, que se vuelva vago. En cualquier caso, este trabajo te recompensará CON CRECES.

5.  ‑Numerosos son los testimonios de autores (incluso de gran entidad literaria y científica, como el filósofo Aldous Huxley, autor de El arte de ver, William Bates, etc.) que han testimoniado en sí mismos y sus pacientes (Bates) un mejoramiento de la capacidad de enfoque. Lo que se afirma, es decir, que la vista sufre un mejoramiento a consecuencia de no utilizar lentes correctivas y de una vida “al aire libre” no es un secreto y está atestiguado por numerosos estudios científicos relacionados con el estrés proximal (por hiperacomodación) y las causas “conductuales de la miopía” (para la explicación exhaustiva, con referencia a los estudios científicos citados, te invito a releer el epígrafe “Miopía: ¿defecto hereditario o adquirido por factores ambientales?”).

Elocuente y muy significativo es el estudio realizado sobre la comunidad de esquimales por Francis A. Young et al., “The transmis-

sion of refractive errors within Eskimo families”, en American Journal of Optometry and Archives of the American Academy of Optometry, vol. 46, n.º 9, septiembre de 1969, pp. 676-685.

El estado de desenfoque durante los ejercicios de enfoque con las lentes DEBE (subrayo DEBE) subsistir y ser ligero, ya que, si no, el cerebro consideraría imposible el objetivo de enfoque, y como consecuencia dejaría de intentarlo. El fenómeno al que me refiero es el de la acomodación de desenfoque, fenómeno bien conocido por la ciencia. Sí, la vista mejora (o al menos no empeora) estando al aire libre y disminuyendo, por tanto, el estrés proximal por hiperacomodación. Esto no tiene NADA que ver con la NECESIDAD del estímulo (o carga de entrenamiento) inducido sobre el sistema visual (léase: desenfoque ligero) NECESARIO para provocar una adaptación del sistema de enfoque.

EN SÍNTESIS: vida al aire libre sí y sí a la necesidad del desenfoque ligero para inducir la adaptación “positiva” de la capacidad de enfoque.